Parallel to III CELAC-EU Summit, movements from Latin America and Europe build People’s Summit (+Esp)

By Zoe Alexandra / People’s Dispatch

This past week, on July 17 and 18, leaders from the Community of Latin American and Caribbean States (CELAC) and the European Union (EU) are converging in Brussels, the seat of the EU, for the third CELAC-EU Summit. The two-day summit was chaired by Ralph Gonsalves, pro tempore president of CELAC and prime minister of St. Vincent and the Grenadines, and Charles Michel, president of the European Council.

This edition of the summit has already caused a stir, with authorities from Cuba and Venezuela strongly condemning the conduct of the EU in the preceding days, specifically regarding the format and content of the meeting, as well as political positions that have singled out members of the CELAC bloc.

Parallel to the heads of state summit, people’s movements, unions, and left parties from across Latin America, the Caribbean, and Europe joined hands to organize the People’s Summit. The People’s Summit, which also took place in Brussels on July 17-18, seeks to be a democratic space for exchange and open discussion about the key issues facing the people of both regions.

The two-day program featured speeches and interventions by movement leaders, such as Joao Pedro Stedile of the Landless Rural Workers’ Movement (MST) of Brazil, Haitian activist Camille Chalmers of the PAPDA party, Peruvian activist and feminist Aída García-Naranjo, and “Mocha”. On the night of July 17, participants heard from prominent progressive figures such as Colombian President Gustavo Petro, British MP Jeremy Corbyn, and Jean Luc Melenchon of La France Insoumise.

Paula Andrea Polanco Palacio, a member of INTAL Globalize Solidarity and part of the organizing team of the People’s Summit, said the space is “an opportunity to go beyond the officially imposed issues and raise the question of what kind of regional integration we want for our two continents and what kind of healthy, democratic and mutually beneficial relations.”

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Versión en Español:

Paralelo a la III Cumbre CELAC-UE, movimientos de América Latina y Europa construyen Cumbre de los Pueblos

La semana pasada, los días 17 y 18 de julio, los líderes de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) y la Unión Europea (UE) convergieron en Bruselas, sede de la UE, para la tercera Cumbre CELAC-UE. La cumbre de dos días fué presidida por Ralph Gonsalves, presidente pro tempore de la CELAC y primer ministro de San Vicente y las Granadinas, y Charles Michel, presidente del Consejo Europeo.

Esta edición de la cumbre ya ha causado revuelo, con autoridades de Cuba y Venezuela condenando enérgicamente la conducta de la UE en los días precedentes, específicamente en cuanto al formato y contenido de la reunión, así como las posiciones políticas que han señalado a los miembros del bloque de la CELAC.

Paralelamente a la cumbre de jefes de estado, movimientos populares, sindicatos y partidos de izquierda de toda América Latina, el Caribe y Europa se unieron para organizar la Cumbre de los Pueblos. La Cumbre de los Pueblos, que también tuvo lugar en Bruselas el 17 y 18 de julio, busca ser un espacio democrático de intercambio y discusión abierta sobre los temas clave que enfrentan los pueblos de ambas regiones.

El programa de dos días contó con discursos e intervenciones de líderes del movimiento, como Joao Pedro Stedile del Movimiento de Trabajadores Rurales Sin Tierra (MST) de Brasil, la activista haitiana Camille Chalmers del partido PAPDA, la activista y feminista peruana Aída García-Naranjo y “Mocha”. En la noche del 17 de julio, los participantes escucharon a destacadas figuras progresistas como el presidente colombiano Gustavo Petro, el parlamentario británico Jeremy Corbyn y Jean Luc Melenchon de La France Insoumise.

Paula Andrea Polanco Palacio, integrante del INTAL Globalizamos Solidaridad y parte del equipo organizador de la Cumbre de los Pueblos, dijo que el espacio es “una oportunidad para ir más allá de los temas impuestos oficialmente y plantearnos qué tipo de integración regional queremos para nuestros dos continentes y qué tipo de relaciones sanas, democráticas y de mutuo beneficio”.