El cubano que reclutó a Ana Belén Montes permanece en total penumbra
El oficial cubano, ya retirado de la Dirección General de Inteligencia, que asegura ser quien reclutó a Ana Belén Montes (65 años), deberá estar muy feliz en estos días con la libertad de la convicta luego de ser condenada en EEUU a 25 años de cárcel por el delito de espionaje.
Este hombre continuará esperando por la luz verde para publicar su novela de ficción que guarda alguna relación con el caso.
Lo conocí hace poco menos de un lustro. Ya estaba alejado de esos menesteres, jubilado. Era vecino de un amigo con quien tenía excelentes relaciones. No resultó muy difícil entablar una conversación muy seria e inundada de requisitos de privacidad, sin ningún elemento de carácter propiamente operativo porque ni se lo pregunté y mucho menos él ofreció tan siquiera indicios. Conversamos como si cada cual estuviese desactivando una mina, con sumo cuidado.
Muy parco, como suelen ser estos oficiales que trabajan en la sombra y que, muy raras veces, aspiran a un reconocimiento público, que sólo reciben una condecoración en una oficina con dos o tres de sus compañeros, una bandera en una esquina y la foto del líder en cualquier pared, me confesó la gran pasión y admiración hacia esa mujer considerada como Analista Superior, de más alta jerarquía en la especialidad Cuba en la Agencia de Inteligencia de la Defensa (DIA) en EEUU a la que ingresó en 1985. Según los fiscales, ya era agente de los servicios secretos cubanos.
Un hito sobresaliente de la Inteligencia cubana en la casi secreta historia de enfrentamiento a los servicios especiales enemigos.
La novela, dedicada a Ana Belén como requisito no negociable en aquel entonces, deberá aguardar ignoro por cuánto tiempo para su publicación. Tal vez nunca se acerque a una imprenta; tal vez no. En Cuba, eso lo decide una sola persona.