Breves: Ayuda a Cuba y el debate Rubio-Demings
2 millones de dólares de USAID a Cuba por el huracán Ian
La semana pasada publicamos un extenso artículo de preguntas y respuestas donde discutimos la ayuda de EE. UU. a Cuba después de la devastación causada por el huracán Ian, una tormenta que asoló la isla y en un momento, después de que pasó el huracán, dejó a toda la isla sin electricidad. .En el artículo ¿Solicitó el gobierno cubano ayuda de EE.UU. a causa del huracán Ian?, teníamos un experto sobre Cuba en la isla y uno que vive en Washington, DC, discutiendo las posibilidades de la ayuda de los EE. UU., y si Cuba realmente la había solicitado, como ha sido ampliamente reportado. El martes 8 de octubre recibimos la noticia de que el Departamento de Estado de los Estados Unidos, a través de USAID, había aprobado “$2 millones en fondos para ayuda de emergencia a los necesitados en Cuba”.
Esta es la declaración de prensa de Ned Price, vocero del departamento, sobre la ayuda a Cuba:
Tras el devastador impacto del huracán Ian, Estados Unidos está brindando al pueblo cubano ayuda humanitaria crítica a socios internacionales de confianza que trabajan directamente con los cubanos cuyas comunidades fueron devastadas por la tormenta. Estados Unidos, a través de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional [USAID], proporcionará $2 millones en fondos para ayuda de emergencia a los necesitados en Cuba.
Estados Unidos trabajará con organizaciones independientes de confianza que operan en el país y que tienen una larga presencia en las comunidades afectadas por los huracanes. Actualmente estamos revisando solicitudes de organizaciones como la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja (FICR) para brindar esta asistencia.
Apoyamos al pueblo cubano mientras trabaja para recuperarse de este desastre. Estados Unidos continuará monitoreando y evaluando las necesidades humanitarias en coordinación con nuestros socios de confianza y la comunidad internacional, y continuaremos buscando formas de brindar un apoyo significativo al pueblo cubano, de conformidad con las leyes y regulaciones de los Estados Unidos.
¿Solicitó el gobierno cubano ayuda de EE.UU a causa del huracán Ian?
El único debate de Demings y Rubio
En su primer y único debate, el senador Marco Rubio, republicano de Florida, y su rival demócrata, la representante Val Demings, se enfrentaron la noche del martes (18 de octubre) en un debate realizado en Lake Worth, una ciudad de Palm Beach, Florida. Fue un debate, por momentos, caliente con Demings acusando a Rubio de mentir “para ganar”. Un intercambio que se produjo cuando Rubio acusó a Demings de nunca haber aprobado ninguna legislación durante su paso por la Cámara de Representantes. Demings fue elegida por primera vez al Congreso en 2016.
En otro intercambio, Rubio acusó a Demings de sentarse en la Cámara [de Representantes] “en pijama” cuando discutía un programa bipartidista aprobado durante las primeras etapas de la pandemia, que según algunos ayudó a evitar un colapso económico.
Al hablar sobre el paquete de ayuda pandémica de $ 1.9 mil millones, Demings respondió diciendo: “El senador, que lo único que habla es boberías, no sabría nada sobre ayudar a las personas y estar ahí para las personas cuando están en problemas”.
Como era de esperar, el debate se centro sobre los temas del aborto, el derecho a portar armas y la inmigración.
En su declaración de clausura, el senador Rubio dijo que “lo único que ella [Demings] hace es votar 100 por ciento con Pelosi”. Demings tuvo dificultades para cerrar, pero obtuvo puntos cuando señaló que Rubio votó en contra de la legislación para limitar los precios de la insulina.
El hecho es, sin embargo, que desde nuestro punto de vista Rubio parecía ganar el debate. Parecía mejor preparado, tenía respuestas más elocuentes y parecía tranquilo. Demings balbuceó algunas de sus respuestas, tenía sudor en la parte superior del labio todo el tiempo y con demasiada frecuencia parecía enojada y nerviosa. La reportera del New York Times, Lisa Lerer, puede haberlo dicho mejor cuando escribió: “Rubio participó en una docena de debates como candidato presidencial en 2016. Esa experiencia se está mostrando ahora, con una actuación pulida. Pero Demings está trayendo el fuego”.
En promedio de encuestas, ya menos de un mes de la jornada electoral, la web Real Clear Politics tiene a Rubio liderando esta contienda por 4,7 puntos porcentuales.